Pétalos

Una década siguiendo el rastro que ha dejado el tiempo caer en la vereda de la vida...

Los suaves pétalos de una  hermosa criatura, mirada picara, intensa y tierna como la misma inocencia, piel suave y rosada como terciopelo, tienden los risos dorados ondeando travesuras en el viento, con una sonrisa brisa se hace paso cada día con un porte de inigualable gallarda, tal parece que vino a revivir un sueño de quimera y que nació para desplazarse entre la multitud que se asombra de su innata competitividad.

Cada pétalo cae silente y ella va detrás recogiendo cada uno… para construir un buque en el tiempo, que un día no podrá impedir que se lo entregue y le pueda amar con libertad, porque ya los pétalos habrán cambiado de ingenua inocencia a dulce adolescencia.

Cuestión de tiempo…

Olvido

Uniforme que daba sentido a su vida, podía caminar erguido, con paso altivo e ínfulas de grandeza y poder, hoy es un recuerdo más en un armario desolado. Quedó en el olvido, y a puerta cerrada solo queda un testigo silente del orgullo quebrantado.

Poco a poco puede advertir el triste escenario de la vida, que va quitando en cada suspiro un peso que presiona los sentidos…

Convertida en espectadora de sueños rotos, del pasar del tiempo, tiempo que reclama entre gritos, gemir y sollozos, pero del que nadie escucha, da gritos en el desierto de su vida…total, es como hablarle al viento, ese que siente que la acaricia cuando no quiere y que la lleva en el vaivén del olvido.

Sucumbió el amor, se escarchó la pasión, solo queda el compromiso, la pena y el temor.

prisionera de los recuerdos (yaniré photography)

Sintiéndose prisionera del gravamen, del desasosiego, y la incertidumbre… pero, lo peor es tener la certeza de que recordará una y otra vez el sentirse desamada y utilizada como a una fulana.  Él solo busca satisfacer su apetito y para cuando termine, ya lo habrá olvidado y querrá tenerle una y otra vez, mientras las lágrimas recorren amargamente por el silencio de un olvido que quisiera enterrar.

Ha quedado enmudecida reclamando argumentos donde es la única que los recuerda, de qué vale aprovechar un instante de lucidez para gritarle a la cara todo el daño causado, todo ese dolor que desgarra el corazón, corazón que se ha endurecido a causa del olvido…

Los pensamientos corren a prisa y maquina sentimientos que no quiere sopesar. Desearía retroceder en el tiempo y haber tenido la fuerza, la entereza y el valor suficiente para pensar en sí un solo instante y correr libre hacia la vida, abrazar el amor, ese que palpita fuerte y silente dentro de su ser, abrazar el sueño del amor y de la libertad que un día se perdió en los recuerdos de quien ya no puede recordar.

A veces lo contempla y siente envidia, porque quisiera tomar su lugar y poder olvidar, lo quiere y lo odia, porque también aflora el recuerdo de un gran amor, y la humanidad que se hace latente y estremece la bondad junto a la compasión.

Mezcla de sentimientos que aturden la ecuanimidad, aún queda un mísero rastro de amor llamado compromiso y lealtad.

Vivir u olvidar…


** De la vida real**

Disparo

¡Eso es un clic y listo!

Sepa usted alguna de las exigencias de un fotógrafo profesional

Horas de estudios; y como cualquier profesión debe continuar capacitándose…

Sacrificios; tiempo, dinero y familia…

Perdida de sueño; estudiando, editando y la responsabilidad de cada nuevo evento te distorsiona el sueño…

Equipo costoso; innumerable…

Utilizar equipo manual; Cada disparo requiere de un conjunto de conocimientos a utilizar en fracción de segundos…

Trabajar bajo presión; Toda una aventura, jamás sabes que acontecerá hasta finalizado el trabajo.

Interrupciones; casi inevitable el que aparezca gente con una réflex y de los celulares ni hablar, la gente se para en el mismo medio y nos hacen el trabajo más difícil…

Responsabilidad; una de las emociones más fuertes, quieres y necesitas quedar bien con todos…

Tiempo; estudiar el lugar antes del evento, preparación del equipo, trayecto, sesión de fotos en la que siempre te pasas del tiempo acordado…

Editar; horas y horas editando; quita aquí, sube allá, aumenta acá, reduce allí, manchas, barros, arrugas, maquillaje, dientes amarillos, etc., etc…

Aplicar conocimientos; (durante y después) reglas de oro, tercios, luz, enfoque, planos, etc., etc…

Cuando por fin haz terminado, comienzan las llamadas y mensajes apurándote, desesperados por ver las fotos, es entendible, pero no entienden el otro lado de la moneda, quedas  exhausto y si eres exigente contigo mismo, estudias tú trabajo antes de entregarlo y la edición no se hace en un momento…

© De los derechos de autor ni hablar, la mayoría de la gente no tiene el más mínimo respeto…

¡Gratis! Ni argumentar de esto…

Si contratas un fotógrafo deberías considerar lo complejo y arduo que es su trabajo.

Jamás le pongas precio a su trabajo.

No compares las fotos de un celular por mejor que las veas con la de un equipo profesional.

Las impresiones que te ofrecen varios establecimientos a un precio ridículo, no son de alta calidad y mucho menos reveladas en un laboratorio profesional.

Lo cierto es que la gente debería apreciar el trabajo de un fotógrafo el cual es arduo y complicado.

¡Mucho más que un simple disparo!