sábado, 11 de octubre de 2014

Maldita droga...

Nadie está exento...
En mi pueblo hay un hombre joven, esbelto, de risos dorados y piel de bronceado envidiable. Todos los días se hace notar, pues camina todo el pueblo, no puede escapar a la vista de nadie.

Un día iba con mi amiga Tita, ella lo mira y me dice “ese joven me parte el alma”.

La historia cuenta que su madre lo vigila, lo cuida y no permite que nadie le haga daño. Pero él es uno de esos jóvenes tranquilos, que solo te pide dinero y continúa su pesado caminar.

Hoy salí a caminar de mañana, como intento hacerlo cada día, y cuando me percato, hay un hombre tirado en el suelo, justo por donde tengo que pasar. Me detuve y le pregunté, ¿Estás bien?, ¿Puedo ayudarte en algo? Él solo movía su cabeza con mucha dificultad y acentuando una respuesta negativa.
Le pregunté si quería que orara por él. Me contestó que no. Le pregunté, ¿Crees en Dios? Débilmente realizó un movimiento de afirmación.

Insistí, “Deseo orar por ti”, movió su cabeza volviendo afirmar que no.

Entonces me alejé, pero no sin antes decirle. “Sabes que Dios puede sacarte del lugar en que te encuentras” ¡Dios te bendiga!

Continué mi caminata, y me invadió un profundo dolor al ver aquel hombre tan joven, con sus vestiduras rasgadas, todo sucio y descalzo.

Oré por él, pues tengo la certeza en mi corazón de que Dios vino a libertar el cautivo, y aunque él no quiso una oración, sí reconoció que hay un Dios. Para mí eso fue suficiente. Yo estoy clara de que puedo acercarme confiadamente al trono de la gracia para pedir misericordia, Dios contestará las peticiones de una oración de acuerdo a su soberanía.

 Pensé en el dolor de esa madre y de todas las madres que viven una prueba tan dolorosa como es la de ver un hijo sumergido en las garras de la droga.

NUNCA…menosprecies a alguien bajo esta condición, sabemos que debemos ser precavidos pues algunos son agresivos y en el momento de su necesidad, ellos no razonan igual que nosotros, ellos solo piensan en la cura.

Pueden ser tantas las razones para llegar a tocar fondo, solo Dios sabe la historia detrás de cada uno de ellos. Si eres un lector de la biblia, recuerda que lo vil y menospreciado de este mundo escoge Dios.

Una oración con convicción puede más que todo el desprecio del mundo, pude ser yo, puedes ser tú, y el mañana...

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...